0-1: El Valencia se reencuentra con la victoria en Zorrilla
El Valencia se reencontró con la victoria en el Zorrilla, tras ocho jornadas sin conseguirla, al imponerse a un Real Valladolid que no halló suficiente capacidad rematadora y que, a pesar de haberse mostrado serio en defensa, no tuvo la suerte de su parte.
El conjunto de Javi Gracia salió con mucha intensidad e imprimió velocidad por las bandas para tratar de sorprender al equipo blanquivioleta, lo que se tradujo en peligrosas llegadas de los jugadores ché, con el uruguayo Maxi Gómez especialmente activo, favorecidas por los desajustes en el centro de la defensa local.
Los laterales del Valencia hacían sufrir a los vallisoletanos, y tampoco terminaban de hallarse cómodos en el plano ofensivo, aunque Toni Villa logró alcanzar el área visitante para enviar sus lanzamientos al exterior de la portería, merced a un buen trabajo de Roque Mesa.
Masip tuvo que entregarse a fondo para impedir el primer gol del rival, primero, tras el disparo de Gayá y, después, para desviar el potente lanzamiento de Soler. Fue el aviso más incisivo del Valencia, que buscaba con avidez la meta local. Por contra, los vallisoletanos apenas inquietaban a la defensa del Valencia.
Y a pesar de ese mayor empuje ofensivo de los valencianos, se llegó al descanso con el 0-0 inicial. Una igualdad que el Real Valladolid salió decidido a romper tras la reanudación, buscando recuperar la valentía en ataque, con Weissman como gran protagonista en ese reinicio del choque.
Pero no tardó el cuadro visitante en volver a mostrar la mordiente ofensiva, con lo que el partido seguía abierto, y Sergio González optó por realizar los primeros cambios, de cara a aumentar la producción en ataque, dando entrada a Hervías y Óscar Plano, mientras que Javi Gracia apostó por Manu Vallejo.
Al final, tanto fue el cántaro a la fuente, que Soler inauguró el marcador en el José Zorrilla, gracias a un potente y seco disparo que Masip no tuvo opción de detener. La respuesta del técnico del conjunto blanquivioleta fue agotar los cambios, para luchar, al menos, por un punto.
En ese momento, Manu Vallejo marcaba un gol, aprovechando un balón muerto, que terminó siendo anulado tras la intervención del VAR, por fuera de juego, lo que daba esperanzas al Real Valladolid para echar el resto en los seis minutos de prolongación.
Y esa opción se produjo, pero el remate de cabeza de Guardiola, en el minuto 96, tras un saque de falta del chileno Fabián Orellana, dio en el palo, por lo que los valencianos pudieron, así, amarrar un triunfo que les había sido negado durante dos meses.