4 a 1. Entre Pemberton y Estrada desdibujaron a un Santos caricaturesco sin sus extranjeros
Sin Rubio, la defensa guapileña muta de granito a flan, y arriba, sin Paradela ni Javon, las balas de cañón mutan en bolas de algodón.
Diego Estrada fue el cañón y Josimar Pemberton el misil. El lanzador y el punta fueron lo más brillante de Guadalupe, pero bien acuerpados por una maquinaria sólida, bien ensamblada por el «Paté» Walter Centeno, y que contrastó con la triste imagen de un Santos que sin sus foráneos es una caricatura de sí mismo. El 4-1 lo dice todo.
Guadalupe fue superior en la primera mitad y se reflejó en las dos anotaciones de Josimar Pemberton, una al 21′ tras cerrar en segundo palo un córner ponzoñoso de Diego Estrada, y la otra al 39′, cuando tomó un rebote de Kevin Ruiz para mandarla a guardar. El remate que se le escabulló al «Chaka» fue del «10».
Eso sí, la brecha futbolística parecía dar para algo más que un estrecho 2-1, porque entre las dos concreciones de Pemberton el Santos consiguió un gol como salido de otro partido, cuando Josimar Méndez aprovechó una buena asistencia de Edder Solórzano para batir a Luis Torres con una definición rastrera (30′).
Pero rápido, al 52′, Estrada le puso cifras más acordes con la realidad del juego, al conectar un zurdazo rencoroso entrando al área, imposible para Ruiz: Guadalupe 3 – Santos 1. Lo hizo después de una corrida en moto de Pemberton por derecha.
Se jugaban solo un cuarto de hora del complemento y Júnior Delgado clavó el cuarto, aprovechándose del talón de Aquiles del pequeño «Chaka». La bola le pasó por encima de la cabeza.
Al 72′ Centeno Corea decidió recitarles el «misión cumplida» a los dos mejores de la cancha, Pemberton y Estrada, después de adueñarse del balón el primero y de romper la zaga el segundo.
Con el amplio marcador, Guadalupe FC regresa a la cima en solitario… a la espera de cómo quede Sporting contra Guanacasteca. Ahora los «Paté Boys» superan por tres unidades al «Giacone Team».
Del Santos, poco o nada. Sin el mexicano Everardo Rubio, la defensa muta de granito a flan, y arriba, sin el cubano Luis Javier Paradela ni el jamaiquino Javon East, las balas de cañón mutan en bolas de algodón. Los guapileños han de rezar porque les den rápido sus respectivos permisos de trabajo.
«Paté» Centeno mandó al campo a Luis Torres, Junior Delgado, René Miranda, Álvaro Aguilar, Darío Delgado y Darril Araya; Aarón Murillo, Fabricio Ramírez, Diego Estrada, Royner Rojas; Josimar Pemberton.
En la banca se quedaron Luis Barrientos, Luis Gutiérrez, Eduardo Juárez, Andrey Mora, Andrés Gómez y Josué Martínez.
«Shock» Rodríguez envió al terreno del «Colleya» a Kevin Ruiz; Juan Diego Madrigal, Sebastián Castro, Pablo Airboine, Alvin Bennette, Luis José Hernández; Denilson Mason, Douglas López, Michael Barquero, Edder Solórzano; Josimar Méndez.
Como suplentes arrancaron Daniel Cambronero, Mauricio Salas, Osvaldo Rodríguez, Isaac Salas, Armando Ruiz, Fabián Pérez, Ryan Cane.