Con un Déxter Lewis intratable, Limón le dice a Saprissa: Cuidado, empieza la persecución
Si Lewis fue figura en Limón, Martínez acabó por ser el villano morado, con dos jugadas claras de gol desperdiciadas. El equipo caribeño vence 1 por 0 a la ‘S’ y empieza la persecución en busca del segundo boleto del grupo B.
El fútbol es tan impredecible como particular: Hace menos de dos meses, Saprissa le propinaba una paliza de 4 por 0 a Limón, y hoy mira como los caribeños le arrebatan tres puntos y empiezan la persecución, en busca de la segunda plaza del grupo B.
Limón se coloca a solo un punto de la ‘S’ (con un juego más), con unos bríos evidentes y un estilo cada vez más solvente, reflejo de un juego con mucha apertura por los costados, la velocidad de Darryl Araya como punta de lanza de los embates y una portería que significa solidez, no importa si juega el suplente o el titular.
EL fútbol es impredecible; Déxter Lewis saltó a la cancha para suplir la baja de Mynor Álvarez, arquero titular de la ‘Sele’ frente a Panamá, y acabó por convertirse en la pesadilla de Saprissa, con tres paradas determinantes en el primer periodo.
Y en cada historia hay un héroe pero también un villano, esta vez fue el turno de Jonathan Martínez.
Si Déxter lo tapó todo, Martínez lo falló todo. El volante central, de arranque frente a los caribeños, desperdició dos jugadas con sello de gol que le dieron vida a Limón, que creció sustancialmente en el segundo periodo, después de una primera etapa de dominio morado.
A las jugadas desperdiciadas por Martínez, se suman dos trallazos de Michael Barrantes repelidos por Lewis.
La historia varió en el inicio de la complementaria, cuando Limón potenció a sus velocistas, principalmente Araya, para proyectar sus embates por el perfil izquierdo.
La ‘S’ perdió la mediacancha durante 15 minutos, tiempo suficiente para que Carlos Soza se encargara de abombar las redes, al 66′.
Se perdió Mariano Torres, también Daniel Colindres y Jonathan Martínez. El pálido rendimiento de los volantes morados fue bien aprovechado por Limón para conseguir la ventaja y luego para sostenerla.
Con el marcador a su favor, Limón retrocedió la línea de presión y cedió la iniciativa, frente a un Saprissa que, de a pocos, retomó el volumen de juego ofensivo, con la dificultad que significa sostenerse cuando el adversario sale rápido a la contra.
En el epílogo del enfrentamiento, el club morado insistió con distintas vías; abrió por las bandas y buscó la espalda de los centrales sin resultados significativos.
Wálter Centeno hizo ingresar a Frank Zamora, quien tampoco influyó lo suficiente para superar a Lewis.
1 por 0, Limón supera a Saprissa y comienza la persecución en la consigna de clasificar.
