Carlos Díaz se siente »carajillo» y sueña entrar a la cancha con su nieto
El portero titularísimo de Golfito en su lucha por ascender a primera división se declara un feliz abuelito, tiene 46 años de edad y se siente como un «carajillo», cómo él mismo confiesa.
Carlos Alberto Díaz no piensa en el retiro, sino en jugar hasta que el cuerpo le diga «alto», lo cual ve muy lejano.
Se visualiza volviendo a primera división en Costa Rica.
«Me preparo como me preparé toda la vida, siendo el primero en llegar y el último en irme», le expresó a Columbia.
«Estamos en esta final, gracias a Dios, porque hemos pasado un montón de dificultades que nadie conoce».
Una de esas dificultades es jugar en Goicoechea, a 302,2 kilómetros de Golfito, lo que representa 5 horas y media en carro, según Google Maps.
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Igual, Díaz está con la motivación al tope.
«Muy feliz, independientemente de la edad, porque el que ama esta profesión la siente igual con 20, con 40, con 60 o con 80, y yo me siento así como vos decís, como un ‘carajillo’, me siento muy bien».
Tienen una «espinita» que espera desclavarse cuando lleguen las vacunas y pase el momento más crítico de la pandemia de Covid-19.
¡Ingresar orondo, como el orgulloso abuelito que es, de la mano de su nieto amado!
«Sería muy lindo poder entrar con Noa a un estadio, y que él vea un estadio lleno y se enamore del fútbol».
¿Cómo hace para volar de palo a palo, manteniendo el estilo espectacular que propició que en Cartago lo apodaran el «Supermán» Díaz?
«Yo me levanto todos los días a las 4 de la mañana para ir a entrenar, hacer dobles turnos, trabajos extras».
Golfito disputa contra la Asociación Deportiva Guanacasteca el título del Apertura en Liga de Ascenso, que les daría medio boleto a la primera división.