Nació en Costa Rica, creció en Costa Rica y sus amigos le preguntan si se siente «extraño» por ponerse la camisa pinolera.
Bryan Rodríguez debutó con 19 años en la primera división con Carmelita. Ya desde los 12 formaba parte de la Academia Wílmer López.
Hoy es uno de los porteros de Nicaragua en la Copa Oro, algo que lo permitió el hecho de que su mamá naciera en ese país.
«Yo empecé con la academia Wílmer López , con don Edgar Artavia, a los 12 años. Jugué ahí hasta los 17 años, debuté a los 19 años con Carmelita. Yo nací en Costa Rica, mi mamá nació en Nicaragua pero es naturalizada costarricense», dijo Rodríguez a Columbia.
«En los tiempos libres trabajaba en Decavisa, eso me ayudaba a sostenerme económicamente. Siempre estuve agradecido con don Edgar por apoyarme», contó el guardameta.
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Rodríguez tuvo que pensarlo. El guardameta no tenía ningún nexo con los pinoleros más que por su mamá, lo cual lo hizo meditar la invitación de Henry Duarte para naturalizarse.
«Hablé con el profe Henry, me contactó también el preparador de porteros Jairo Villegas y lo consulté con mi mamá, mi novia, con varia gente cercana y me dijeron que lo hiciera. Fuimos muy realistas, lo pensamos bien y gracias a Dios todo se dio».
«Varias amistades me dijeron que cómo iba a asimilar eso, que si no iba a sentirme extraño y la verdad no…somos profesionales, agradecido con la gente, con el cuerpo técnico,con la gente de la Federación y con Dios por permitirme disfrutar de esto», relató el portero.
