Fútbol Nacional
Adonis Pineda: Cuando la cruz es imposible de cargar, es mejor dejarla caer
«Presión asfixiante», «ambiente grotesco» y hasta «la Liga le hizo un favor», estas palabras utilizan los allegados de Pineda sobre su relación con Alajuelense, marcada por el gol en la final y una cruz demasiado pesada para cargar sobre los hombros. Hoy, busca disfrutar del fútbol de nuevo, lejos del club de su vida.
Hace apenas unos días, el guardapalos Patrick Pemberton conversó con su excompañero de equipo y a quien considera «su hermano», Adonis Pineda, sobre su presente y la decisión de desligarse de Alajuelense.
Pineda, de 23 años y oriundo de Hojancha, Guanacaste, firmó con la Liga a los 14 años; después de una estancia corta a prueba, el club rojinegro optó por ‘becarlo’ y traerlo a Alajuela para que terminara de formarse.
Algo pequeño para el puesto, el joven se sobrepuso a ‘su estampa’, a partir de otras características valiosas como sus reflejos felinos, ubicación y concentración.
Trabajaba mucho, era algo tímido y callado, pero con un margen de crecimiento alto, que se confirmó cuando disputó un mundial Sub-20 como titular, siendo la figura más importante de la ‘Sele’, con paradas determinantes.
Luego le tocó acompañar a Patrick, como el arquero suplente rojinegro, una etapa en donde se compenetraron y se hicieron buenos amigos.
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Por eso, cuando Pineda le contó que había decidido pedirle a la Liga que lo dejara libre para convertirse en ficha del Sporting, el veterano arquero optó por responderle con una frase: «Hágalo, ahora podrá disfrutar el fútbol».
En una negociación discreta y poco resonante, Adonis se despidió del club que lo proyectaba como el arquero del futuro, un año después de la fatídica jugada que marcó su futuro, cuando salió en falso y Yendrick Ruiz mandó la pelota a las redes con un buen cabezazo, una jugada que alargó la serie y, a la postre, le permitió a Herediano ganar la corona, extendiendo la sequía rojinegra.
Fue solo una jugada en un torneo de más altos que bajos para el cancerbero, pero quedó guardada en la retina de una frustrada feligresía rojinegra.
Para Patrick, el joven portero hizo lo correcto. Irse de la Liga y empezar de nuevo significa liberar una presión que define como «asfixiante».
«Él se siente muy tranquilo y a gusto de haber tomado esa decisión, se le respeta, la presión que estaba viviendo era asfixiante, ahora él con esa salida de la Liga puede disfrutar el fútbol de una manera diferente», explicó Patrick.
«Algunas veces uno necesita ese espacio y esa libertad, porque todo se le achacaba a él. Yo pasé por ese proceso, gracias a Dios pude superarlo obteniendo varios títulos, pero la presión hacia él fue más grotesca, ha tomado una decisión muy sabia». añadió el guardapalos.
El criterio de Pemberton lo comparte su primer entrenador en las divisiones inferiores de Alajuelense, Wílmer López.
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El Pato recuerda como ahora cuando Adonis llegó al club. Al poco tiempo, se trajo consigo a su madre para que le hiciera compañía, pues toda su familia vivía en Guanacaste.
El exjugador afirma que Pineda nunca olvidará esa jugada, pero cree que se repondrá y, en algún momento, volverá a un equipo grande.
El exvolante sostiene que la afición manuda fue demasiado dura con el joven, que apenas disputaba su primer certamen como titular con los rojinegros.
De alguna manera, López dice que la grada le endosó a Pineda la culpa de los siete años de sequía, algo que define como injusto.
«Me duele porque tiene unas condiciones bárbaras, una gran juventud. Cometió errores, pero a veces la afición quiere culparlo de que por él se tiene la sequía de los siete años y no es así. La gente lo acribilló y es una lástima porque es un muchacho con mucho potencial», explicó López.
Mientras, en Sporting le agradecen su compromiso y entusiasmo.
Contrario a la realidad del equipo, que pelea por salvarse del descenso, afirman que el joven arquero es un trabajador incansable, al que le motiva la idea de ganarse un lugar en la selección preolímpica de Costa Rica.
El directivo del club, Bertony Robinson, dice que el joven, «tiene hambre y muchas ganas de surgir», algo que se percibe en la dedicación y el compromiso que ofrece en cada entrenamiento.
«Es un jugador callado, trabajador, buen compañero y no tenemos ninguna queja hacia él», apuntó Robinson.
En el plantel evitan referirse a lo que sucedió con la Liga y se enfocan en conseguir que el futbolista retome toda su confianza.
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Patrick, en cambio, cree que el guardapalos podrá liberarse y retomar la curva de crecimiento que traía antes del yerro en la final.
«Le dije que había tomado una buena decisión, que le permitirá liberar presión y va a levantar nuevamente su rendimiento», contó Pemberton.
«Adonis es muy callado, enfocado en lo que quiere. Sé que esta decisión le permitirá tomar su nivel. Es un gran portero, que demostró en la Liga y Grecia y no por un error lo vamos a crucificar», agregó el portero.
Sobre la decisión de la Liga de acceder a que Pineda partiera a Sporting, el ‘Pato’ cree que, al fin de cuentas, puede ser un nuevo inicio.
«Para mí la institución le hace un favor. A él le cobran situaciones que cometió por su falta de experiencia y al final la gente no lo perdona, es mejor que demuestre la calidad que tiene y estoy seguro que puede ser portero en cualquier equipo de este país», concluyó López.
Fotografía principal: La Nación.
