Barrantes: Símbolo de coraje. Jugó la final con un dedo luxado
Michael Barrantes tiene tantas agallas, que ni sufrir una luxación completa en un dedo de su mano lo saca de una final nacional.
El futbolista morado vivió esta situación en la final ante Alajuelense. En el primer tiempo y tras una jugada muy rápida, sufrió este accidente tras un choque con Jonathan McDonald. Empero, al entrar el médico morado a la cancha e intentar resolver la situación, Barrantes lo único que solicitó fue seguir jugando a como diera lugar.
“Él sufrió lo que se llama una luxación completa. Cuando entré tenía el dedo completamente luxado y aprovechamos que el jugador estaba en calor que llamamos y cómo se dice popularmente le montamos el dedo ahí mismo en la chacha. Así se le redujo la luxación y se le aplicó analgésicos y antiinflamatorios en el medio tiempo para que pudiera completar el partido”, explicó el doctor morado, Esteban Campos.
El médico saprissista fue enfático en que esa es una situación muy dolorosa para el afectado pero que intentaron actuar de la mejor manera ante el gran deseo del jugador de seguir dentro de la cancha.
“Es una acción muy dolorosa pero quizás por haberlo hecho tan rápido y en calor, se reduce este dolor. El volver a montar el dedo es muy doloroso pero lo teníamos que hacer en ese instante. Luego le inmovilizamos el dedo y pues son funciones que hay que hacer de inmediato. Para eso nos tienen acá”, agregó Campos.
La tarde de este martes a Barrantes se le harán más pruebas para conocer con exactitud el alcance de la lesión.