Silbatero es uno de los más golpeados por la suspensión del campeonato, pero recibió una muy buena noticia en medio de la crisis por el Covid19.
Inició como joyero y siempre ha viajado desde su natal Guatuso a cada uno de los entrenamientos arbitrales en el Proyecto Gol y a los partidos de primera división.
Allen Quirós decidió no quedarse de brazos cruzados ante la crisis que azota a los silbateros, quienes dejaron de recibir ingresos por el parón del campeonato. Los árbitros ganan por cada partido pitado.
Él encontró plaza como bombero en la Estación de La Fortuna de San Carlos, con lo cual alivianó la carga económica para su familia.
“Con el arbitraje estamos en números rojos, pero gracias a Dios hemos venido trabajando en Bomberos de Costa Rica”.
“Entre tantas noticias negativas, hay otras muy buenas. Me dieron plaza en la Estación de Bomberos de La Fortuna, entonces estamos muy bien por ese lado”, contó Quirós.
Esta semana Columbia dio a conocer que la Fedefútbol le prestó alrededor de 80 mil colones a un grupo de 20 árbitros, quienes deberán pagar el monto en 4 tractos cuando vuelta el torneo.
