La UEFA anunció oficialmente el cambio de sede para la final de la Champions League.
Ahora este partido se jugará en el estadio do Dragao en Porto, Portugal.
“La final estaba programada para tener lugar en el Estadio Olímpico Atatürk de Estambul pero, tras la decisión del gobierno del Reino Unido de colocar a Turquía en su ‘lista roja’ de destinos de viaje COVID-19, organizar la final allí habría significado que ninguno de los clubes nacionales los fanáticos hubieran podido viajar al juego”, informó el ente a través de un comunicado.
“Después de un año de que los aficionados no pudieran acceder a los estadios, la UEFA consideró que era necesario hacer todo lo posible para garantizar la asistencia de los aficionados de los equipos finalistas”.
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Asimismo, la UEFA tuvo la intención de que el juego se realizara en Inglaterra, sin embargo, no fue posible.
“La UEFA discutió trasladar el partido a Inglaterra pero, a pesar de los esfuerzos exhaustivos por parte de la Asociación de Fútbol y las autoridades, no fue posible lograr las exenciones necesarias de los acuerdos de cuarentena del Reino Unido”.
La decisión de llevarse el encuentro para Portugal también radicó en la rapidez en que la federación de ese país y el gobierno trabajaron, para garantizar un escenario conveniente para el partido.
“Las autoridades portuguesas y la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF) intervinieron y trabajaron rápida y sin problemas con la UEFA para ofrecer un lugar adecuado para la final. Debido a que Portugal es un destino de la ‘lista verde’ para el Reino Unido, los fanáticos y jugadores que asistan a la final no tendrán que ponerse en cuarentena a su regreso a casa”.
El choque entre el Chelsea y Manchester City se disputará el sábado 29 de mayo.
