Entre lágrimas, padre de venezolana relata el horror que vivió tras el asesinato de su hija
Carlos Caicedo, testificó durante tres horas la mañana de este miércoles en los Tribunales de Pavas en el juicio contra un guarda de seguridad sospechoso de matar a Carla Stefaniak en unas Villas en San Antonio de Escazú.
Caicedo hizo un extenso relato acerca del viaje de su hija a Costa Rica y la tragedia familiar que enfrenta desde noviembre del 2018 por la muerte violenta de su hija. Puede observar las declaraciones en video al final de esta nota.
El padre lamentó que Carla no cancelara el viaje cuando tuvo la oportunidad debido a que no tenía quién le acompañara. Sin embargo, insistió y consiguió que una allegada viniese al país con ella.
«Por qué insististe hija», dijo entre lágrimas
Los problemas comenzaron cuando trató de comunicarse con Carla el 28 de noviembre, día en que ella cumplía años. Se sentía sorprendido de no tener noticias de ella ni de su regreso a Estados Unidos donde residían.
Su hijo Carlos y su nuera le ocultaron que la turista estaba desaparecido por temor a que sufriera un problema grave de salud, pues padece de presión alta.
Se enteró de la situación el día que un amigo le preguntó qué había sucedido con su hija em Costa Rica tras ver publicaciones en redes sociales. Se fue a su casa y se encontró un vehículo de una televisora.
Su familia le contó lo sucedido y le pidió a su hijo que viajara a nuestro país a buscar a Carla. Él vino con un amigo identificado como Greg.
Caicedo cuenta que cuando ellos llegaron a las Villas en San Antonio de Escazú, les dijeron que Carla se había ido el 28 de noviembre a las 5:30 a.m. en un vehículo de Uber.
Debido a la falta de información y tras el paso de los días, el padre decidió venir a Costa Rica.
A su arribo en horas de la noche, lo recibieron con la noticia de que habían encontrado un cuerpo en la propiedad donde están las Villas.
De inmediato, decidió ir a la morge para esperar que abrieran al día siguiente y salir de dudas.
Tras varios intentos no le permitieron ver el cadáver y por eso solicitó ayuda de un abogado.
Horas después le avisaron que el cuerpo hallado en las Villas era el de su hija de 36 años. Ese golpe lo devastó.
El dolor más grande
Cuando finalmente pudo acceder a la morgue, Caicedo contó el horror y el dolor intenso que vivió al reconocer a Carla.
Dijo que el personal de la morgue le había advertido de que el cuerpo estaba en muy malas condiciones por la descomposición. Aún así se armó de valor y se enfrentó a la pesadilla.
«Ella (una funcionaria) me lo había advertido. Está negra, no tiene pelo, está hinchada, no es la que usted conoció, la que usted crió», dijo con profundo llanto.
«No era mi muchachita. Yo no quería que fuera. No quería que fuera ella. Pero sí era», agregó desconsolado.
Caicedo dice que ha requerido de apoyo psicológico para vivir con esa cruda imagen en su cabeza.
https://www.youtube.com/watch?v=57vOVMazH9I
Nota por Alejandro Arley.