Una vez analizada la sentencia integral, la Fiscalía Adjunta de Cartago «determinó que es procedente recurrir a un recurso de apelación».
«El despacho señaló que es respetuoso de la resolución emitida por el Tribunal Penal, pero no comparte los criterios de la absolutoria, por lo que está trabajando en la apelación. La fundamentación será presentada ante el Tribunal de Apelación de la Sentencia, por lo que, de momento, no es posible dar más detalles», informó el Ministerio Público ante consulta de Noticias Columbia.
Tras el juicio, la Fiscalía había informado que iba a analizar el fallo para decidir si apelaba o no. Al final de cuentas optó por ir a la segunda instancia.
El caso
El pasado 7 de febrero, el Tribunal Penal de Cartago absolvió por dudas al jugador Marcel Hernández Campanioni de cuatro delitos de violación y dos delitos de relaciones sexuales con persona menor de edad. Además le levantó las medidas cautelares que había en su contra como el impedimento de salida del país.
El caso se remonta a agosto del 2018. Hernández fue denunciado por una joven que tenía 16 años al momento de los hechos.
Para el juicio, la representación del Ministerio Público presentó dos acusaciones; una principal por los casos de violación y una subsidiaria o alternativa por la supuesta relación impropia.
En la etapa de conclusiones, la fiscal Carolina Martínez, descartó las violaciones y solicitó pena de cuatro años de prisión por dos delitos de relaciones sexuales con persona menor de edad.
Los jueces absolvieron al futbolista de todos los cargos tras analizar las pruebas y testimonios, entre ellos, el de la joven denunciante.
«Tenemos la declaración testimonial de la persona ofendida, que a criterio del Tribunal ha tenido una serie de elementos que han generado una duda en el ánimo del Tribunal de la dinámica de cómo fue que se dieron los hechos», expresó el juez Rafael Bolandi Piedra.
Bolandi habló de una «duda razonable» que encontró apoyo en la prueba. «La persona ofendida ha sostenido a todas luces que esto se trató de una violación. Nosotros hemos observado que la prueba documental dice que es una situación contraria y además de ello así lo ha referido la prueba técnica y pericial», recalcó.
Otro aspecto que se tomó en cuenta en el fallo es que en los procesos judiciales debe existir una relación entre la acusación y la sentencia.
En este caso, la muchacha declaró que fue víctima de violación, sin embargo, el Tribunal y la Fiscalía concluyeron que eso no ocurrió.
La Fiscalía sostuvo que las relaciones sexuales fueron consentidas y por esos hechos pidió la pena de cárcel, ya que se trataba de una menor de edad. No obstante, la denunciante nunca aceptó ese escenario como válido o verdadero.
El juez alegó que entonces no procedía condenar a Hernández por relación impropia cuando la misma denunciante lo señaló hasta el final por otro supuesto delito que no pudo probarse.
