Fútbol Nacional
Johnny Chaves: ‘En el país se utilizan métodos tradicionales que están obsoletos’

¿Cuál es el paso número uno para reconstruir el fútbol tico? ¿Se puede aplicar la escuela neerlandesa en el país? Formado en una de las mejores academias del mundo, el técnico compara lo que se hace aquí con la realidad de Europa y profundiza, «nos estamos quedando atrás».
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«El precio que hemos pagado en nuestra carrera los técnicos formados en Europa es ese. Sabemos cómo es el alto nivel, pero en Costa Rica no podemos ejecutarlo», confiesa con sinceridad el técnico Johnny Chaves.
Formado en Alemania y en Países Bajos (antes conocido como Holanda), el hoy estratega de Grecia construyó su currículum en Europa, en donde se especializó en entrenamiento deportivo en la Universidad de Leipzig y luego cursó las licencias de entrenador de la UEFA en la academia neerlandesa.
Aunque confiesa que en Costa Rica hay mucho talento, los problemas formativos que arrastran los futbolistas cuando suben a la Primera le impiden ejecutar ciertas metodologías de entrenamiento de primer mundo.
En entrevista con ‘Columbia’, el técnico respondió a la pregunta del millón: ¿Cuál es el paso número uno para reconstruir el fútbol tico?
Hoy en día se habla de ejecutar en Costa Rica una ‘reconstrucción’ del fútbol, basada en menos improvisaciones y que produzca mejores resultados en las selecciones nacionales. ¿Cuál percibe que es el paso número uno para empezar una reestructuración que permita salir de este bache que vive la Mayor y, en general, el fútbol tico?
«Lo primero y más importante es tener una visión de cómo queremos que sea el fútbol de Costa Rica y todo comienza en la Federación. Queremos que nuestro fútbol tenga una línea de juego, entonces formemos entrenadores en esa línea, también habría que sentarse con los clubes y establecer una línea de juego en la que todos cooperemos con la Sele».
¿Puede profundizar y poner un ejemplo de a qué se refiere con una línea de juego?
«Por ejemplo, Alemania. Ellos empezaron a cambiar su fútbol, se fueron a ver que hacía España y Holanda, y ahora los holandeses dicen que Alemania juega como ellos lo hacen. Los alemanes fueron humildes, fueron a ver qué estaban haciendo los países que mejor estaban jugando fútbol y vieron cómo trabajaban en la liga menor».
«Para poner otro ejemplo, los holandeses incluso fueron a España para ver qué estaban haciendo diferente y lo aplicaron en su país. Eso es lo que necesitamos, tomar un buen grupo de técnicos, capacitarlos, pero no con un curso ‘de relleno’, sino definir las tendencias del mundo y traer buenos especialistas que enriquezcan nuestro fútbol, no solo a nivel profesional, sino desde abajo, en las fuerzas básicas».
Lo que menciona entonces sería como cambiar el plan de estudio de las licencias de entrenadores y preparar a los técnicos para que ejecuten un estilo definido como país.
«No es cambiar todo el plan de estudio, sino mejorarlo. Por ejemplo, en Holanda se encierran cada año los técnicos para revisar el plan de estudio, ver qué deben mejorar, cómo está la metodología. Ellos constantemente están mejorando su metodología de trabajo».
«En Alemania hay un pedagogo que está innovando para trabajar con los niños. Ya hay muchas cosas que se usaban antes en el fútbol y en Alemania no se utilizan. Ahora están buscando que el niño aprenda por sí mismo. En las formas de trabajo se salen de lo tradicional e innovan».
«Otro ejemplo, en Holanda acaban de inaugurar un centro de innovación. La idea es ver metodologías, ver estilos y así innovar dentro de su fútbol. Nosotros nos hemos quedado muy atrás y seguimos con formas tradicionales que están hoy en día obsoletas».
¿A qué se refiere con una forma tradicional obsoleta?
«Principalmente en los ejercicios prácticos. Por ejemplo, a veces yo veo a la Selección calentar como yo calentaba. O sea, un ejercicio de parejas frente a frente, y eso no tiene nada que ver con la dinámica de juego. Hay ejercicios que ya no se están utilizando. Antes usted aplicaba mucho del atletismo en el fútbol, pero luego determinaron que había que pasar del fútbol a la fisiología y no de la fisiología al fútbol. Así que empezaron a investigar los piques del futbolista, los saltos y todas estas características para que la preparación sea cada vez más específica».
«Yo a veces veo a la Selección con calentamientos que nada que ver, cuando el fútbol es dinámico. Usted necesita un calentamiento dinámico, que es un protocolo para preparar el cuerpo, pero tiene que ir directamente relacionado con la línea de juego. Hay gente que todavía hace colectivos y eso ya no, ahora se buscan formas de juego más cortas para que sea integral con la parte física. Tenemos que mejorar todo eso para ser competitivos en este mundo, porque nos estamos quedando atrás».
«Usted ve a Canadá y es un equipo que hace buena presión y tiene juego posicional, también Estados Unidos. Todo eso que menciono va a mejorar la dinámica del fútbol tico, que todo mundo dice que es lento. Todo tiene relación con el cómo se ejecuta el entrenamiento. Nos hemos ido quedando atrás y a veces había jugadores que llegaban a las selecciones menores y no los preparaban bien, los prestábamos una semana y no se mejoraba».
«La Federación tiene que cuidar la calidad del fútbol y la Unafut es la que lo organiza. Entonces toca decir, ‘ok, sentémonos a ver cómo está el fútbol’. Ver cómo están los entrenadores, cuáles son las tendencias en el mundo y llevar una delegación de técnicos a ese país que mejor lo está haciendo para ver cómo se trabaja y qué podemos incorporar a nuestro trabajo para un proyecto a largo plazo».
«A veces yo veo a la Selección calentar como yo calentaba. O sea, un ejercicio de parejas frente a frente, y eso no tiene nada que ver con la dinámica de juego. Hay ejercicios que ya no se están utilizando».
Guardando las distancias del caso, pero buscando las similitudes con Holanda, como por ejemplo el tamaño de la población, ¿usted cree que Costa Rica pueda ejecutar un plan similar al que se hace en Holanda y ver resultados en el mediano plazo?
«Claro que sí. Escogiendo los profesionales adecuados. Usted ve que Henry Duarte se preparó en Alemania, Paulo Wanchope en Inglaterra y hay varios entrenadores que hemos salido a prepararnos a Europa».
«Tal vez el precio que hemos pagado en nuestra carrera es ese. Sabemos cómo es el alto nivel, pero en Costa Rica no podemos ejecutarlo. Es delegar en este grupo de personas la reorganización de la parte deportiva, la metodología y decir, ‘estas son las tendencias que queremos’. Decirle a la Federación y sentarse con Julio Murillo, director de desarrollo y capacitación. Julio es una persona valiosa, desde hace años ha intentado que la academia esté mejor. Yo sé que hay personas muy valiosas que no han tenido la posibilidad de aportar y revolucionar todas las estructuras de la Federación».
Eso es llamativo don Johnny, que algunos técnicos paguen las consecuencias por tener una metodología muy elevada que es difícil de ejecutar con el jugador de Costa Rica. ¿Eso realmente pasa don Johnny, saber que hay ciertas metodologías que aunque los técnicos quieran, no se pueden ejecutar?
«Claro, porque usted llega a Primera y en Primera es rendimiento, entonces usted tiene que buscar ganar. Entonces usted tiene que montar un plan de juego ambicioso, pero también tiene que terminar de formar a algunos jugadores cuando ya están en la Primera División y entre más se da, cuesta más el cambio. Entonces, usted tiene que repetir una y otra vez aspectos con jugadores que han perdido distintas etapas de formación. Y el problema es que en Primera usted no tiene ese espacio, usted necesita ritmo de competencia para competir. Y cuando uno termina de formar jugadores es complicado porque atrasa el trabajo».
Comprendo, ¿entonces hay un rezago de los jugadores cuando suben a Primera?
«Totalmente. Usted puede hablar con Jafet Soto, con Paulo Wanchope o con Henry Duarte, gente que ha estado afuera del país, y si se quisiera jugar a una cosa, usted necesita que el joven llegue a la Primera con los conceptos, pero hay gente que no sabe conceptos básicos. Es muy difícil, porque el fútbol es colectivo y si usted quiere ciertos movimientos necesita de la inteligencia táctica. Por ejemplo, qué hago cuando no tengo el balón y en dónde me ubico, son conceptos necesarios».
Y es difícil para el entrenador porque se le juzga por resultados. Entonces la gente puede decir que cierto entrenador no sirve por esa razón, y puede que sea porque el jugador no tiene lo necesario para ejecutar una metodología. Vea lo que le sucede a Paulo Wanchope. Todos alaban su metodología europea, pero no se le han dado los resultados deportivos.
«Exacto, todo mundo habla muy bien de la metodología de Paulo, pero sus aspiraciones son muy altas y para eso hay que tener un proceso largo. Ahora, en el camino uno se encuentra jugadores muy buenos mentalmente y técnicamente, pero no son todos. Usted va encontrando jugadores que muy rápido asimilan todo. Le puedo comentar el caso de Raymond Salas o Wílmer Azofeifa, que asimilan rápido, pero no son todos y el fútbol es colectivo».