El Juzgado de Ejecución de la Pena de San José inspeccionó este miércoles la cárcel de San Sebastián para verificar si está en condiciones para recibir imputados desde celdas judiciales.
Sobre el centro penitenciario recaen órdenes de cierre judicial debido al estado de las instalaciones y a la mezcla de privados de libertad condenados con personas que cumplen medidas cautelares, lo cual es prohibido según la legislación del país.
Por esa razón, el Ministerio de Justicia se vio obligado a realizar reparaciones y tomar medidas correctivas, para recuperar la cárcel.
Según Adaptación Social, desde julio anterior el reclusorio está listo, a la espera de que el juzgado realice la inspección para que reconsidere la clausura del CAI San José, y así poder recibir imputados que permanecen aglomerados en celdas judiciales.
Fue hasta julio anterior que se cumplió a cabalidad las órdenes giradas desde el 2016, según confirmó la ministra de Justicia, Fiorella Salazar.
La jerarca aseguró que durante los últimos cuatro años se ejecutaron reparaciones en instalaciones eléctricas, servicios sanitarios y dormitorios.
En caso de habilitarse nuevamente el CAI San Sebastián, existirían 300 espacios para recibir privados de libertad provenientes de celdas del OIJ, una vez que el juzgado dé el visto bueno.
La Fiscalía de Ejecución de la Pena, la Defensa Pública y oficiales de la Policía Penitenciaria acompañaron la visita realizada por el tribunal.
