Leipzig derrota y liquida al Manchester United, dándole el boleto al PSG y a Keylor Navas
La última fecha de la fase de grupos de la UEFA Champions League quedó marcada por la retirada del Estambul Basaksehir en el partido contra el París Saint Germain donde ataja el costarricense Keylor Navas.
Los hechos tuvieron lugar a los 20 minutos del partido, cuando el marcador reflejaba un empate a 0. El árbitro, el rumano Ovidiu Alin Hategan, señala una falta a favor del PSG y el exinternacional camerunés Achille Pierre Webo protesta de forma virulenta.
Alertado por el cuarto árbitro, el colegiado acude a la banda y su asistente le dice que ha sido «el negro», según asegura el exjugador camerunés, actual miembro del equipo técnico del Estambul.
Fue tal la cólera desatada por el epíteto, que los otomanos se retiraron del campo. También lo hicieron los parisinos.
La confusión invadió la situación después. La UEFA pensó, incluso, en que la segunda parte del otro choque del grupo H, entre el Leipzig y el Manchester United, con una plaza en juego, no se jugara. Después, anunció la reanudación del partido de París. Nada de esto sucedió. Ni se interrumpió el choque de Alemania ni se retomó el del Parque de los Príncipes.
Pendientes de la decisión de la UEFA el Leipzig se clasificó a octavos tras ganar al Manchester United en Alemania por 3-2.
Leipzig, Manchester United y PSG acudieron a la última fecha empatados en 9 puntos.
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El español Angeliño impulsó al equipo germano. Marcó el primer gol y dio el segundo al maliense Amadou Haidara. Justin Kluivert hizo el tercero. La reacción inglesa llegó tarde. Con un penalti transformado por Bruno Fernandes en el 80 y el gol de Paul Pogba dos después.
Así, el Leipzig se clasificó con 12 puntos. PSG y Manchester United tienen 9 cada uno, pero el criterio de desempate es el duelo particular. El cuadro inglés ganó en París 1 a 2, pero el campeón galo triunfó en Manchester 1 a 3, por lo que aún perdiendo se clasifica.
Otros grupos
El doblete de Cristiano Ronaldo reflejó la impotencia del conjunto azulgrana, sonrojado en Europa otra vez. Por primera vez en trece años, el Barcelona, que había ganado los cinco partidos previos, no quedó campeón de la fase de grupos. El G es de la «Juve».
La fulgurante salida del campeón italiano deshizo al equipo de Ronald Koeman. Dos tantos de Cristiano, ambos de penalti, y otro del estadounidense Weston McKennie dieron al conjunto de Andrea Pirlo el marcador que necesitaba para arrebatar a su rival el liderato en el cuarteto.
Le servía al Barcelona con perder por menos de dos goles. No fue capaz y estará en el bombo de los segundos clasificados, que tendrán un rival superior y jugarán la vuelta de octavos a domicilio.
También amarró la clasificación el Lazio, que logró ante el Club Brujas el punto que necesitaba (2-2) para estar en octavos. Durante unos minutos fue primero, incluso, del Grupo F pero el Borussia Dortmund terminó por ganar en San Petersburgo (1-2).
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El argentino Joaquín Correa y Ciro Immobile, de penalti, marcaron para el conjunto italiano y el holandés Ruud Vormer y Hans Vanaken reflejaron el empuje belga, que jugó durante casi una hora con diez hombre por la expulsión del ucraniano Eduard Sobol.
Mientras, en San Petersburgo, Lukasz Piaszcek y Axel Witsel remontaron el gol del argentino Sebastian Driussi para instalar al Borussia Dortmund como primero de grupo en una jornada histórica para la competición ya que su delantero Youssoufa Moukoko se convirtió, con dieciséis años y dieciocho días, en el jugador más joven en debutar en la Liga de Campeones.
Moukoko, de origen camerunés nacionalizado alemán, superó el registro del defensa Celestine Bayaro, que se estrenó en la máxima competición continental con el Anderlecht en 1994, con dieciséis años y 86 días.
El Sevilla se reencontró con el triunfo en un partido irrelevante. Ganó en Rennes (1-3). Una victoria sin premio porque el cuadro de Julen Lopetegui era ya segundo de grupo con cualquier resultado.
Un doblete del marroquí Youssef En-Nesyri y el gol del francés Jules Koundé certificaron la victoria del equipo español, que en la tabla quedó por detrás del Chelsea, que acabó la fase de grupos con un empate frente el Krasnodar. Remy Cabella adelantó a los rusos y Jorginho, de penalti, evitó la derrota del conjunto inglés en un choque intrascendente.
