Limón sufre agresiva desbandada de jugadores, pero renace con ilusión de 300 talentos
«Pensábamos que habían más jugadores comprometidos», confiesa Reynaldo Parks, sorprendido por la desbandada de futbolistas; solo quedan tres figuras de la última planilla y la mayoría de patrocinadores también se alejaron del proyecto. En medio de un complejo escenario, a Limón le toca volver a sus raíces y resurgir de las cenizas cuando aún hay una llama encendida: Salieron a buscar jugadores por todo el Caribe y se encontraron 300.
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«Pensábamos que habían más jugadores comprometidos con el club», reconoce con algo de incomodidad el gerente de Limón, Reynaldo Parks, testigo principal de la ‘desbandada’ de figuras a otros clubes de Primera y Segunda.
Del equipo que descendió de categoría, solo se mantienen en el club tres futbolistas, Alexander ‘la rata’ Espinoza, Andrey Francis y Jefferson Barnett. En cambio, la continuidad del joven talento, Roan Wilson, sigue en el aire.
A Limón le tocará resurgir de las cenizas. Perdió a la mayoría de sus futbolistas y también a casi todos los patrocinadores, reconoce Parks.
Los ingresos por derechos de televisión cayeron radicalmente, pues el dinero que reciben los clubes de la Liga de Ascenso es mucho menor que en Primera.
«Hay que reinventarse», confiesa Parks.
«El ánimo nace de nosotros mismos en el club; cuando usted cree en lo que hace, por más duro que sea el golpe, te vas a levantar. Creemos en la juventud y en lo que significa el fútbol en la provincia», añade.
Los trabajos. Hace ya tres semanas, el club empezó a trabajar con las uñas pero con propósito y mística, regresando a las bases del éxito de todo proyecto futbolístico en el Caribe: el talento.
Después de múltiples visorías en la provincia. Visitaron Matina, el Valle de la Estrella, Batán y también hicieron pruebas en el estadio Juan Gobán.
El resultado inicial impresiona. El club recibió a 300 futbolistas de Limón. La mayoría jóvenes que habitualmente participan en torneos locales.
De este amplio número de futbolistas, el equipo eligió a 30 talentos para conformar el plantel que afrontará la próxima campaña en la Liga de Ascenso.
Como el grupo es tan joven, el presupuesto disminuye y alcanza para construir un nuevo proyecto, en busca del Ascenso a la división de honor.
«Hay que hacer un presupuesto de jugadores sin experiencia igual hay que seguir pagando la luz, el internet y el mantenimiento, la gente de contabilidad».
«No, no esperábamos (una desbandada tan grande). Pensábamos que habían algunos jugadores comprometidos con la institución. Algunos se fueron a otros equipos de Segunda y eso nos dice con quiénes contamos. Las cosas pasan por algo, seguimos encontrando nuevos valores para buscar una posible venta de jugadores en el mediano plazo», agregó Parks.
Al gerente deportivo le sorprende el poco sentido de pertenencia de algunos futbolistas. Reconoce que el único jugador que partió del club y aún regresa, se integra y entrena con el club durante las vacaciones, es Mayron George.
El legionario formado en la cantera caribeña visita constantemente el equipo. Parks asegura que esto motiva a los jóvenes y les aporta para creer en sí mismos y luchar por un futuro fuera de Costa Rica.
Incluso, George dijo a ‘Columbia’ que «está destrozado» por el descenso limonense y no pierde la fe de que suceda el milagro y Limón pueda continuar en la máxima categoría en la próxima campaña.
«El descenso es un dolor para toda la comunidad. Las palabras de Mayron calan en todos, es de los pocos o el único jugador que tiene un sentido de pertenencia de los que se han ido. Él comparte con los jugadores, es de los futbolistas agradecidos y con sentido de pertenencia», añadió Parks.
Al igual que George, la dirigencia lucha para que el club no baje de categoría. Presentó un recurso legal ante Unafut y la Fedefútbol en el que solicita no se valide el descenso del club, por una serie de aparentes incongruencias.
Ambos órganos lo rechazaron, así que llevó el caso ante un tribunal del Icoder, encargado de resolver este tipo de inconsistencias y que tiene la última palabra de lo que pase con los caribeños de ahora en adelante.
Por ahora, este tribunal no se pronuncia.
Es la última oportunidad de Limón para seguir en Primera. De no resolverse a su favor, partirá a Segunda a competir y a buscar de nuevo el ascenso.
Al mismo tiempo, el club tiene cuatro disputas legales para que otros clubes de Primera les paguen los derechos de formación de algunos jugadores, formados en la cantera del club y que partieron del equipo.
La resolución de estos casos le podría permitir al equipo generar ingresos frescos para afianzar el proyecto en la Liga de Ascenso.
Otra vez, Limón trata de resurgir de las cenizas.
Su talento inagotable es la llama de la esperanza que nunca se apaga.
En el siguiente informe, ‘Columbia’ explica la realidad del arquero limonense, Patrick Sequeira, tras finalizar su préstamo con el Celta de Vigo: