Lo que asegura el técnico limonense Ricardo Allen del juego ante Saprissa
La historia se repitió una vez más. Limón FC volvió a armar equipo “por enésima vez” a las puertas del inicio del campeonato. Es la misma historia de todos los técnicos de Limón, cantera inagotable, que ve cada torneo como se le marchan sus mejores jugadores formados en sus fuerzas básicas o del talento de la región.
Como contraparte, Saprissa no gana en el estadio Juan Gobán desde el 2016, los morados llegan como punteros del certamen con 13 unidades y requieren puntuar porque Herediano está a tan solo un punto y Grecia, San Carlos y Jicaral se ubican a tres unidades.
“Hay partidos que te generan mayores expectativas, emociones y todo el ambiente que se vive como que te anima un poco, pero viendo la situación en que estamos nosotros no debemos depender del entorno, independientemente, de quien sea el rival, por más que Saprissa genere emociones y pasiones”, comentó el técnico Allen de Limón.
La dirigencia y cuerpo técnico de la Tromba lucha por que la angustia no se apodere de los jugadores, en su lucha por mantenerse en la primera división. Para colmo de males los Universitarios, que estaban a siete unidades, se acercaron a solo cuatro puntos, con la victoria en Santa Bárbara.
“Estábamos conscientes que el arranque iba a ser complicado con la partida de 13 jugadores y de ésos nueve o diez eran la base del torneo pasado. Por eso nos ha costado bastante poder reformar el nuevo equipo y potenciarlo para que pueda rendir”, comentó el estratega Ricardo Allen.
Los caribeños perdieron a toda su zona defensiva. Se marcharon Edder Nelson (Universitarios), Alvin Bennett y Jemark Hernández (Santos), Greivin Méndez (San Carlos) y Ryan Bolaños (Cartaginés).
Como si fuera poco perdieron al portero Bryan Cordero (Santos) y al volante Miguel Tercero (Santos). Con anterioridad se les había marchado, también, al equipo guapileño Steven Williams. En total ocho jugadores titulares.
