Mientras comercio sufre restricciones, irresponsables siguen haciendo negocio con fiestas clandestinas en pandemia
Entre sábado y la madrugada del domingo, la Fuerza Pública atendió 174 incidentes relacionados a fiestas clandestinas y eventos sin los permisos correspondientes.
En el cantón de Pococí, Limón, unas 120 personas fueron sorprendidas en un rancho en una actividad de artes marciales.
El presunto organizador de la actividad es un hombre de apellido Velásquez, a quien se le clausuró el local por incumplimiento de aforo.
El recinto fue desalojado tras comprobarse que el evento no contaba con la autorización de ley.
En el cantón de Montes de Oca, fueron intervenidas dos fiestas clandestinas. En una de ellas permanecían 114 personas y en la otra 200 personas.
En el operativo participó la Policía Municipal del cantón y la Policía de Tránsito, que realizó diferentes infracciones.
Por otra parte, en una finca privada de Paraíso de Cartago, un juez de la República ordenó un allanamiento para detener una fiesta con más de cien personas.
En el operativo, los oficiales decomisaron dos armas de fuego, 170 mil colones, licor de diferentes tipos y brazaletes para colocarles a los asistentes, mientras Tránsito realizó varias multas por restricción vehicular.
En un bar clandestino de Santa Cruz en Guanacaste, la Fuerza Pública tuvo que enfrentar varios perros agresivos, cuando presuntamente su dueño los liberó para impedir la entrada de los efectivos de seguridad.
Un policía fue mordido en una de sus manos por lo que tuvo que recibir atención médica.
Por este caso, el propietario del inmueble de apellido Rosales fue llevado a la Fiscalía.
En el bar se decomisó un total de 865 bebidas alcohólicas y 26 gramos de aparente marihuana.
En Esparza, Puntarenas, un bar fue clausurado debido a que incumplió con el aforo permitido, con la presencia de unas 200 personas, de las cuales, 60 son menores de edad.
Finalmente, en Puerto Viejo en Limón, la policía interrumpió una fiesta con más de 300 asistentes, en su mayoría extranjeros. También, había menores de edad presentes.
En apariencia, algunos asistentes consumían drogas en el lugar, donde también se vendía licor de contrabando traído desde Panamá.
Como responsable de la actividad se detuvo a un sujeto de apellido Bronw, quien fue presentado a la Fiscalía.
El Ministerio de Seguridad Pública recuerda que en su página www.seguridadpublica.go.cr hay un enlace para denunciar este tipo de incidentes.