Año tras año, los morados sacan a relucir un estribillo que quedó sellado para siempre de tanto repetirse cual mantra… dando resultado muchas veces.
«No se repartan nada mientras Saprissa esté vivo».
La frase del mítico dirigente Jorge Guillén es de las frases favoritas del saprissismo, sobre todo durante las fases finales.
El cuadro morado fue blanco de críticas esta temporada, sobre todo tras perder de local ante rivales tradicionales como Cartaginés (0 a 4) y Alajuelense (2 a 3), pero levantó nivel y ya va de primero del Grupo B, dependiendo de sí mismo para amarrar esa posición… aunque todavía no se ha clasificado.
«El equipo va retomando confianza», reseña Ricardo Blanco, lateral derecho.
«Y lo más importante es que vamos retomando nivel en la fase final del torneo», dijo tras las victorias sobre Pérez Zeledón (4 a 0), Guadalupe (5 a 1) y Herediano (2 a 3), entre las que se intercaló un empate en liga local (0 a 0 con Santos) y una victoria internacional (Municipal de Guatemala, 4 a 1).
Destaca el crecimiento del equipo morado.
«Futbolísticamente, es importante que nos vamos metiendo todos en la misma sintonía», finalizó Blanco.
Antes del cierre de la fase regular en Costa Rica, Saprissa juega este martes a partido único los cuartos de final de Liga Concacaf, de visita ante el Marathón de Honduras, transmisión Columbia a las 9.15 p.m.
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