Rigurosa, prensa francesa señala gol por horqueta y penal tirado en dirección a Keylor
Sorpresivamente, el FC Nantes se fue al descanso con ventaja de tres goles sobre un París Saint-Germain que no tuvo respuesta contundente
Keylor Navas, que regresó a la titularidad tras su suplencia ante el Real Madrid, no pudo evitar ninguno de los tres goles del Nantes, equipo que le dio al París Saint-Germain un baño de humildad.
Sorpresivamente, el PSG perdió 3-1 ante el Nantes, que de alguna manera le mostró a los merengues el camino de la remontada para el choque de vuelta por UEFA Champions League, por disputarse en el Santiago Bernabéu. Aunque en París se celebró quizás en demasía la victoria del martes… La verdad es que fue apenas 1-0, con gol agónico de Mbappé. Y falta el juego de vuelta para sellar la serie de octavos de final.
Volviendo a la derrota ante el Nantes, la prensa gala no le echó toda la culpa al portero costarricense, que en este partido dejó en la banca al italiano Gianluigi Donnarumma. Empero, sí dejó claro que no hizo un buen partido y que dio la sensación de poder hacer algo más, de vestirse de héroe como otras veces.
Apenas a los 4 minutos Moses Simon abrió el marcador tras culminar un contragolpe, quedó solo-solo frente al tico y lo batió con toque rasante entre las piernas, cerca del talón izquierdo de Navas; Quentin Merlin aumentó la renta en el 16 con un zurdazo impresionante, al ángulo superior derecho y desde dentro del área, inatajable; y Ludovic Blas, de penalti, en el tiempo añadido del primer segmento, cerró la cuenta. Disparó fuerte y al centro, casi por donde estaba el costarricense, ligeramente a la derecha; Keylor aguantó, pero no le dieron los reflejos más que para apenas rozar el tremendo balazo.
ParisFans.fr le puso un 6. «No podemos decir que haya hecho una buena primera parte. Tres goles, incluido uno en el que no está libre de reproches por pasarle debajo de las piernas. Pero con todo y todo hizo algunas paradas. El balance no le es favorable».
Mientras tanto, ButtFootballClub.fr le endosó un 4. «Si no puede hacer nada en los dos primeros goles, decide quedarse en el medio en el penalti de Blas, pero le faltó mano firme para repeler el tiro centralizaso, a la par d él». También le reconoció paradas a Girotto (12º) y Simon (29º).
FootMercato.fr también le puso un 4. «A diferencia del portero contrario, el costarricense fue víctima del acierto de los canarios, superado primero por Kolo Muani y luego por el disparo angulado de Merlín. Puso hacer más en el penalti de Blas, que iba casi en su dirección. El que fue preferido a Donnarumma no se inquietó en la segunda mitad, salvo el tiro raso de Blas (86º), pero estos 3 goles encajados no deberían jugar a su favor».
En general, después del 1-0 dándole un baile al Real Madrid que no se reflejó en el marcador, se presumía otra exhibición del París Saint-Germain después de sacar los colores al cuadro de Carlo Ancelotti, que el pasado martes no fue siquiera capaz de disparar entre los tres palos de su rival. Pero no. El Nantes dio la gran sorpresa.
Días después de su gran victoria, el París Saint-Germain, líder todopoderoso de la Ligue 1 con diez puntos de ventaja sobre el Olympique Marsella, se las prometía felices por su buen estado de forma y, también, por la aparición en su once titular del tridente Neymar-Mbappé-Messi después de casi 80 días sin que Mauricio Pochettino pudiera alinear a los tres juntos desde el principio.
Sin embargo, el choque ya comenzó torcido para el cuadro parisino, que tuvo que lidiar con una espesa niebla que tal vez favoreció al Nantes. Las inclemencias meteorológicas siempre suelen jugar en contra del equipo que tiene más calidad y más dependencia de las individualidades. Ese es el caso del París Saint-Germain, que firmó una primera parte lamentable que liquidó sus opciones de ganar el partido.
En ella, el Nantes, con el español Pedro Chirivella a los mandos en el centro del campo, pasó por encima de su rival y en sólo 45 minutos dejó sin argumentos a los hombres de Pochettino, que apenas tuvieron una ocasión de Messi que salvó el guardameta Alban Lafont y otra de Mbappé que también sacó el portero del Nantes.
Abajo 3 a 0, el PSG respiró en la segunda parte con el tanto de Neymar nada más salir del vestuario gracias a una asistencia tremenda de Messi, que apareció de la nada para dar un pase de tiralíneas que no desaprovechó el brasileño para reducir distancias.
Apenas diez minutos después, en el minuto 59, el mismo Neymar estropeó su acierto al fallar un penalti. Seguramente, fue uno de los peores que lanzó en su carrera. Antes de conectar con la pelota, dio unos cuantos pasitos ridículos y después disparó muy, muy flojo. Alban Lafont detuvo el lanzamiento con facilidad y ahí se acabó la opción de remontada del París Saint-Germain.
Lo siguió intentando, pero Mbappé esta vez no tenía el punto de mira afinado. Se le escapó el 3-2 con un disparo que rozó el larguero y, ya sin Neymar, su sustituto, el argentino Ángel Di María, lanzó un córner hacia la cabeza de Marquinhos que no encontró portería por muy poco.
No hubo mucho más. El París Saint-Germain sacó la bandera blanca y dio un paso atrás después de exhibirse frente al Real Madrid pocos días antes. En una primera parte nefasta, el Nantes, un club que aspira a jugar en Europa la próxima temporada, mostró el camino a los hombres de Ancelotti, que ya tienen un espejo en el que reflejarse para alcanzar los cuartos de final de la Liga de Campeones.