Se trata de cuentas en el Banco Nacional y el Banco Popular. Japdeva informó que toma previsiones para mantener la operación portuaria y continuar brindando el servicio público.
«Estas cuentas se suman al embargo ocurrido la semana anterior a dos de sus principales cuentas operativas en el Banco de Costa Rica en las que se albergaban los superávits captados para el pago de los 570 empleados actuales y las prestaciones de los trabajadores salientes de Japdeva bajo la ley 9764», informó la institución la tarde de este jueves.
«Las acciones de Sintrajap (sindicato de trabajadores) también hicieron que el embargo cayera sobre la cuenta del Fondo de Ahorro y Capital de los Trabajadores en el Banco Popular, en la que se mantienen los montos aportados por Japdeva a dicho fondo, así como los aportes y pagos de préstamos por parte de los trabajadores y extrabajadores de la institución», agrega el informe.
La presidenta ejecutiva, Andrea Centeno, manifestó que las acciones de embargo que han caído sobre cuentas adicionales «ponen en mayor dificultad y riesgo la estabilidad de la entidad portuaria.
«Nos están llevando a una situación cada vez más crítica si no cambian las medidas en el corto plazo. La Administración hizo un enorme esfuerzo por pagar los salarios de los empleados la semana anterior quedando en una posición de mayor debilidad financiera a la que ya nos veníamos enfrentando», añadió Centeno.
El pasado 18 de mayo, un juez del Primer Circuito Judicial de Limón rechazó de plano conocer el recurso de apelación contra las medidas de embargo. Japdeva presentó tres nuevas medidas y prepara acciones adicionales.
