El café de Costa Rica esquiva la crisis por la pandemia y reporta un comportamiento muy positivo en mercados internacionales.
Una de las razones principales es que la gente consume más café durante su confinamiento en casa.
Muchos exportadores solicitan embarcar de forma expedita, por lo que se han enviado más de un centenar de contenedores a la semana, según confirma el ministro de Agricultura, Renato Alvarado.
Un informe del Fondo Monetario Internacional señala que el único mercado con tendencia positiva, fue el de café Arábica, cuya producción se da en 100 por ciento en el país.
Para el sector, es importante la calidad del café, su cosecha amigable con el ambiente, la estabilidad política del país y su legislación, según señala la directora ejecutiva del Instituto del Café, Xinia Chaves.
Costa Rica envía su producto a Nueva York, que representa un 12 por ciento del mercado de los Estados Unidos, donde se trabaja con estrictas medidas sanitarias, así como a Oakland y Baltimore, que representan un porcentaje de ese mercado, de 35 y 13, respectivamente.
El precio internacional de venta de exportación del café de Costa Rica aumentó en siete por ciento, al pasar de 190 dólares el saco con 46 kilos a 203 dólares.
La actividad cafetalera en el país beneficia a unas 133 mil familias del centro y occidente del país.
