Don Óscar, el número 10 de Bélgica se llama Eden Hazard
Qué feo se escucha al técnico de Costa Rica, Óscar Ramírez, equivocarse en las conferencias de prensa con los nombres de los jugadores rivales, máxime cuando son mundialmente súper conocidos.
¿No percibe que queda mal él, expuesto para que sus detractores se burlen o simplemente lo despedacen en redes sociales?
Y, lo que es peor, ¿no se da cuenta que deja a la representación tricolor en mal?
- “Abrimos un poco el medio, que es lo que aprovecha este muchacho, el número 10, no sé cómo se llama”, dijo para asombro general este lunes, en referencia, ni más ni menos, que a la estrella del equipo belga.
- “Hazard”, le sopló al oído el jefe de prensa de la Fedefútbol, don Cristian Williams, en plena conferencia de prensa.
A mí, sinceramente, me dio vergüenza (qué diferencia con Roberto Martínez, el español que dirige a Bélgica, quien nombró a varios jugadores costarricenses de mucho menos renombre que Hazard).
Eden Hazard ha sido noticia durante las últimas semanas, porque, según prensa europea, fue parte de las razones por las cuales Zinedide Zidane renunció al Real Madrid, porque lo quería como refuerzo, en oposición al deseo del presidente merengue, Florentino Pérez.
Hazard brilla desde 2011, con el Lille, con el que inclusive levantó una Ligue 1, fue Jugador del Año y líder de asistencias en Francia, por lo que no duró mucho en la primera división gala. Entonces, saltó a la Premier League, donde se consagró con el Chelsea, campeón de Inglaterra dos veces, monarca de Europa League y en la actualidad uno de los centrocampistas más cotizados del orbe.
Y ni qué decir con los “Diablos Rojos”, su selección, con la que en 82 partidos ha marcado 21 goles y dado 22 asistencias, una asombrosa efectividad.
Don Óscar, ese tal “10”, el que bailó a Costa Rica este lunes, el que dribló ticos como si fueran conos de tránsito, de aquellos anaranjados, se llama Eden Hazard… ¡Es el capitán belga, por Dios santísimo!
Y los volantes de contención de Brasil se llaman Casemiro y Coutinho, no “Casimiro” ni “Cutiño”. Ojalá que los haya estudiado mejor que al “10” de Bélgica.
Y, de una vez le digo que ese jugador que usted describió como “chiquitico”, el suizo, y que tampoco supo nombrar en la conferencia del domingo, es un tal Xherdan Shaqiri, quien ha jugado con grandes equipos como Inter de Milán y Bayern Múnich, y actualmente milita con el Stoke City de Inglaterra.
Shaqiri compensa sus 1,66 metros de altura con un fútbol portentoso, que lo convierte en un mediocampista del alto nivel, potente, veloz, hábil, con visión y definición, al punto que, siendo volante, lleva más de 100 goles entre clubes y selección, a sus 26 años de edad.
Por favor, don Óscar, ojalá que no se le olvide el nombre o lo pronuncie bien, pero, por encima de todo eso, ojalá que encuentre cómo referenciarlo mejor que al tal Hazard, y también a Neymar, y a Mitrovic, entre tantos otros, porque si no la vamos a pasar mal, muy mal en Rusia.