David Patiño asegura que no teme ser despedido y que sabe manejar la presión
Con David Patiño de técnico, Herediano no empata.
Pierde o gana y los reveses le ganan a las victorias, cinco a cuatro.
La campaña es peor que discreta, y la última desilusión fue este jueves, 2-1, en Nicoya.
»Hemos sido irregulares. No hemos logrado tener una constancia de resultados», aceptó Patiño.
»Si yo temo (ser despedido), tengo muchos años de vivir de esto. Vivimos así. Vivimos con presión siempre y la presión es un privilegio que tenemos los técnicos. La he vivido toda mi vida como jugador y como técnico. Sé manejarlo», aseveró y dijo no sentir temor.
El mexicano dijo que no se preocupa por eso, sino por encontrar esa regularidad que no ha podido hallar el Team.
«Soy muy meticuloso en el análisis», aseveró. «Hay que tomar decisiones para enderezar el rumbo».
«Estábamos a tres puntos de alcanzar el tercer lugar general… y hoy estamos en el octavo. Eso demuestra que el certamen está muy parejo. No hay excusas».
Patiño dijo que «el resultado es lo que cuenta al final. No hay excusas».
»No tenemos tiempo. No hay tiempo. Estamos obligados por la grandeza de este equipo a pelear por los primeros lugares siempre, lo tenemos que hacer ya. Estamos a una victoria, a una victoria y media de estar en zona de clasificación».
Durante el partido fue visto en las tribunas del Chorotega de Nicoya el técnico Óscar Ramírez, exseleccionador nacional.
Consultado el secretario técnico rojiamarillo, Roberto Carpio, sobre qué hacía «El Machillo» observando el juego y conversando con directivos florenses, respondió que «eso habría que preguntárselo a don Jafet (Soto, gerente general)», quien ya había salido del Chorotega de Nicoya cuando Columbia quiso consultárselo.
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